El rol de la mujer en la ciencia ha sido casi invisible a lo largo de la historia y muchas de ellas han sido condenadas al olvido. Y es que la presencia femenina en las ciencias ha sido puesta en tela en juicio, denostada y negada desde el principio de los tiempos. Ni se consideraba que pudieran tener el mismo, e incluso mayor, nivel de inteligencia que los hombres.
En la actualidad, esto está cambiando. Hoy el número de mujeres en la universidad supera al de los hombres, pero la distribución aún sigue siendo desigual en las distintas disciplinas.
La primera mujer en la ciencia
La participación de las mujeres en el ámbito científico ya no es inusual, aunque persisten desafíos para que accedan a puestos directivos y de liderazgo en igualdad de condiciones con sus colegas masculinos.
En honor a ellas, podemos mencionar a la científica más antigua de la cual se tiene noticia, Tapputi-Belatekallim, un nombre que brilla en la historia de la ciencia, aunque muchas veces haya permanecido en la sombra del olvido.
Esta notable mujer, que vivió en la antigua Mesopotamia alrededor del 1200 a.C., es conocida por ser una de las primeras destiladoras y perfumistas documentadas en la historia. Su nombre significa “La Señora que hace que el aceite huela agradable” en acadio, la lengua que se hablaba en esa región.
En una época en la que la alquimia y la preparación de sustancias aromáticas eran una forma incipiente de química, Tapputi-Belatekallim desarrolló técnicas y procesos para destilar aceites esenciales de plantas y flores. No solo creaba perfumes, sino que también tenía un profundo conocimiento sobre la mezcla de ingredientes aromáticos. Sus registros, escritos en tablillas de arcilla cuneiforme, han perdurado a lo largo de los siglos y han brindado una visión invaluable de su experiencia y sus métodos.
Otra mujer que dejó un legado y no fue reconocida en su época
Sumado al legado de Tapputi-Belatekallim, figura Hipatia de Alejandría,una destacada matemática, astrónoma y filósofa griega que vivió en el siglo IV d.C. Durante una época en la que la participación de las mujeres en la ciencia era excepcionalmente rara, Hipatia se destacó como una erudita y maestra respetada en la Biblioteca de Alejandría, un famoso centro de conocimiento de la antigüedad.
Sus contribuciones incluyen avances en matemáticas, astronomía y filosofía, así como la enseñanza de estos campos a sus estudiantes. Hipatia también fue conocida por su independencia y su compromiso con el conocimiento y la educación, lo que le ganó admiradores pero también enemigos.
Desafortunadamente, su vida se vio truncada trágicamente cuando fue asesinada en un contexto de tensiones políticas y religiosas en Alejandría. A pesar de su muerte prematura, su legado perduró como un símbolo de la lucha por la igualdad de género en la ciencia y como una de las figuras más sobresalientes en la historia de las mujeres en la ciencia.
La lista sigue y representa el poder femenino en la ciencia
- Maria Sybilla Merian (1647-1717)
Destacada naturalista y entomóloga neerlandesa, obtuvo prestigio por su trabajo en el estudio de la vida vegetal y los artrópodos. En 1699, a los 52 años, obtuvo el permiso para viajar a Surinam, donde documentó exhaustivamente la flora y fauna, convirtiéndose en la primera aventurera en cruzar el océano en busca de conocimiento.
- Caroline Herschel (1750-1848)
Astrónoma alemana de gran talento, es conocida por descubrir ocho cometas y ser co-inventora del telescopio Herschel. Aunque su entrada en la astronomía se debió a un desengaño amoroso, su dedicación y habilidades la convirtieron en una destacada científica.
- Émilie du Châtelet (1706-1949)
Figura relevante en la física y la filosofía durante la Ilustración en Francia, es reconocida por su trabajo como matemática y física. Su traducción al francés de los “Philosophiæ Naturalis Principia Mathematica” de Newton sigue siendo una referencia importante para los francoparlantes interesados en las ideas del científico inglés. También es conocida por ser amante de Voltaire.
Estas mujeres rompieron barreras en una época donde la ciencia no tenía lugar para la mujer. Su valentía y determinación dejó descubrimientos invaluables para la humanidad y representó un antes y un después de la presencia femenina en el terreno de las ciencias.